Sin brújula ni rumbo.

SIN BRÚJULA NI RUMBO

A día de hoy hay dos certidumbres incuestionables: el país está a la deriva y el Gobierno no tiene capacidad para poner las cosas en orden. Por eso el Congreso debe ponerlo con urgencia.

La relación de disparates del Ejecutivo sigue creciendo: el Presidente se burla del Parlamento remitiendo un cuestionario inventado por él y sus asesores reiterando que la Comisión Lava Jato es un circo. Con eso pretende desvirtuar indicios graves de su gestión como ministro chakano en el caso de la IIRSA Sur, pese a que hay indicios razonables que lo involucran. Y descalifica también todo el esfuerzo de la lucha contra la corrupción, la extradición de Toledo y el descubrimiento de una red delincuencial que viene desde el 2001.

Mientras tanto se está usando groseramente al Ministerio Público como una suerte de policía política en contra de Alan García y Keiko Fujimori con el fin de distraer a la opinión pública después de 17 años de investigaciones sin hallazgo alguno.

En paralelo la ineficiencia del Gobierno llega a niveles de oprobio: la primera ministra defiende lo imposible en el caso de un censo hecho sin planificación, con errores mayúsculos y fraude procesal. Sonriente ante las cámaras pretende que los peruanos creamos que los chanchos vuelan y que este sigue siendo un gobierno de lujo, cosa que no fue ni siquiera el primer día.

Meche Aráoz también ha logrado lo que era su mayor sueño: destruir a la Caja de Pensiones Militar – Policial, pasándola irresponsablemente a la ONP y dejando desprotegidos a miles de uniformados que dieron su vida por la patria en la lucha contra el terrorismo y la preservación del territorio nacional.

 

Su odio visceral a las FF.AA.: la ha llevado a dar un paso que no quedará impune, mientras que tres miembros del Tribunal Constitucional, verdaderos forajidos, no solo continúan la persecución de los marinos que debelaron la insurrección terrorista hace casi cuarenta años, sino que inclusive van en queja írrita ante la CIDH.

Entre tanto, nada menos que este fin de semana piquetes senderistas han recorrido Lima, Miraflores, San Borja y otros distritos evidenciando que el terrorismo está pasando a un nivel más agresivo y peligroso.

Y encima de todo este pastel torvo, PPK llama perros a los damnificados por el fenómeno del Niño de principios de este año, que ahora están abandonados por otro personaje que no ha dado talla: Pablo de la Flor.